SOLUCIÓN DE MESSER
La harina se enfría con dióxido de carbono antes de entrar en la amasadora. El enfriamiento se realiza mediante pulverización con CO2 líquido. Mediante la dosificación precisa del gas añadido, se puede ajustar la temperatura de la harina con gran precisión.
Ventajas:
- La masa es más fácil de procesar y no es pegajosa
- La masa absorbe el agua más fácilmente
- No sube demasiado rápido después del porcionado
- Producción continua y uniforme
- Calidad reproducible del producto
- Uso óptimo del medio refrigerante gracias al contacto directo con el producto
- Instalación sencilla del suministro de refrigerante en el sistema transportador
- Se puede instalar en todos los sistemas transportadores neumáticos y mecánicos existentes
- Evita la adición incontrolada e antihigiénica de hielo a la amasadora.
La temperatura de la harina se puede ajustar con precisión antes de añadir el agua, incluso cuando se requieren temperaturas bajas de la masa (por ejemplo, 12 °C), independientemente de la temperatura exterior.
Messer suministra una unidad de refrigeración adaptada a sus necesidades, así como el gas necesario con calidad alimentaria certificada.
