Refrigeración criogénica - Aplicación de gases
Los sistemas de refrigeración criogénica se necesitan con frecuencia en reactores para la refrigeración criogénica con el fin de alcanzar temperaturas de proceso muy bajas en el campo de la farmacia y la química fina de última generación (por ejemplo, en la producción de principios activos). Ayudan a dirigir los pasos de síntesis en la dirección correcta o a aumentar el rendimiento del producto. No es raro que se requieran temperaturas tan bajas como -100 °C, y que la misma etapa del proceso requiera también temperaturas de proceso elevadas. El sistema de refrigeración criogénica según el proceso Cryocontrol de Messer suministra precisamente esta energía de refrigeración o calor controlado.
Este sistema de refrigeración criogénica utiliza la energía fría del nitrógeno líquido. El principio del proceso es sencillo pero eficaz: se interpone un intercambiador de calor criogénico con un circuito de medio de transferencia de calor intermedio entre la fuente de energía fría, el nitrógeno, y el reactor. Este circuito permite tanto enfriar como calentar el reactor. En el modo de refrigeración, el circuito de transferencia de calor se enfría con nitrógeno líquido dentro del intercambiador de calor criogénico. Posteriormente, el nitrógeno puede utilizarse en forma gaseosa para otras aplicaciones, por ejemplo, para la inertización. Durante la refrigeración criogénica, la baja diferencia de temperatura entre el medio refrigerante y el producto hace que el contenido del reactor se caliente y se enfríe de forma muy suave y uniforme. Esto permite la síntesis de productos sensibles a la temperatura.
Ventajas de un sistema de refrigeración criogénica de un vistazo:
- Libre elección de la temperatura en un amplio rango
- Posibilidad de refrigeración y calentamiento
- Sin refrigerantes nocivos
- Se puede utilizar en zonas con riesgo de explosión
- Bajos costes de mantenimiento
- Bajos costes de funcionamiento gracias al doble uso del nitrógeno
¿Cómo funciona un intercambiador de calor criogénico?
Solución MESSER para la refrigeración criogénica
Los sistemas de refrigeración criogénica según el proceso Cryocontrol® se diseñan individualmente según los requisitos del cliente y se adaptan de forma óptima a cada caso concreto. Para realizar pruebas, se dispone de una planta piloto móvil que, junto con el suministro de nitrógeno adecuado, se puede instalar fácilmente en las instalaciones del cliente (también en zonas peligrosas).
El operador tiene la posibilidad de determinar las temperaturas o las capacidades de refrigeración y calefacción necesarias para su proceso en condiciones prácticas sin grandes inversiones. Los resultados obtenidos se incorporan directamente al diseño para la configuración de un sistema de refrigeración criogénica Cryocontrol a medida.
